Me preguntaste que era lo que más temía perder,
la memoria respondí.
Entonces, en aquel mismo instante
comprendí que mi mundo forjado a base de pequeñas piedras
era fuerte, recio y sin grieta alguna.
Y a la muerte?
No tienes miedo de morir, Carlos?
Con memoria, nunca nadie muere.
2 comments:
Me gustaria saber que piensas
ahora al respecto
tres otoños despues
Saludos desde mi ordenador
atono
despues de un accidente de te
en las teclas jjj
Saludos!
Concuerdo con tu punto sobre cómo nuestra memoria nos mantiene conectados al pasado.
Post a Comment