Monday, June 20, 2011

Sustitutos


Aquel dolor que se antojaba pesadísimo e imperturbable duró hasta terminar el verano; no hay mas realidad que “el ahora” y lo que pensábamos que no cicatrizaría jamás, con los años se ha ido ensombreciendo, oscureciendo y finalmente desapareciendo casi sin dejar rastro.

Cuando ya no pensabas encontrar a nadie que te cuidase, que te abrazase noche tras noche, que te besase de aquella manera tan especial, resulta que un lunes cualquiera de primavera se cruza en tu camino ese chico que casi no te llama la atención y que poco a poco se terminaría convirtiendo en tu centro de atención.

Tú que pensabas que siempre estarías soltera, ahora esa idea suena ya lejana porque alguien ocupa su lugar, duerme en su lado de la cama, se sienta en aquel lado de la mesa que le reservabas y aunque al principio era extraño, raro e incluso curioso, poco a poco la confusión fue normalizándose y al final terminas pensando que sí, que va a ser verdad que todos somos sustitutos del alguien.


Foto: Amparo Balsas

1 comment:

JLAndreu said...

Me encanta comprobar cómo los cepillos se rozan las caras, y no he hecho mucho esfuerzo. Quisiera pensar que no soy sustituto de nadie y que nadie me puede sustitutir a mí. Me gusta verme insustituible y único. ¡Qué jodido es de aceptar! ...que supongo que es lo que el texto me quiere decir, y con lo que me enfrenta. Bueno. Un abrazo!